Acompañábamos a las personas en su decisión de reducir la toma de drogas psiquiátricas.
Para ello:
- Acercábamos con honestidad información sobre riesgos, beneficios, problemas, incógnitas, mitos, etc…., tanto acerca de tomarla como de no tomarla.
- Dábamos la posibilidad de pensar juntes sobre los miedos que aparecían, las cosas que podían hacerlo más fácil, qué hacer si las cosas se complicaban, los problemas que se podían generar a raíz de esta decisión , etc…
- Estos os encuentros para hablar de discontinuación eran con al menos dos personas del equipo.
- La duración era de más o menos de 90 minutos (pudiendo alargarla o acortarla si para alguien era importante).
- Se podía invitar a quién se quisiera a cada encuentro (a nadie, amigos, pareja, familia,…)
- Podíamos vernos en persona, online (utilizando plataformas de reunión gratuitas) o mezclando ambos formatos, lo que fuera necesario para facilitar que estuvieran las personas invitadas.
En cuanto al dinero, funcionamos siempre con un cálculo provisional y aproximado de cuánto necesitábamos para que esta respuesta a las crisis fuese materialmente sostenible para nosotres. Cada entorno vió en cada momento qué posibilidades tenía de contribuir a esta cantidad, que era:
- 320€ para estar disponibles para reunirnos todas las veces que se necesitase durante un mes
- 80€ para encuentros puntuales
Para más información sobre la estructura económica que tenía y tiene el proyecto pincha aquí.